Serpientes venenosas = Banquetes enormes.

Para la mayoría de las personas las serpientes son simple y básicamente animales que:

" Son venenosos, asquerosos, peligrosos, etc...y comen presas enormes".

Bueno, afortunadamente sabemos a ciencia cierta que solo un pequeño porcentaje de serpientes son venenosas y de ese porcentaje una cifra todavía menor son peligrosas para el ser humano debido a sus venenos. Ahora bien, ¿que hay de cierto en lo referente a que comen presas enormes? bueno, basta con echar un vistazo en algunas fotos en Internet para comprobar que desde luego en ocasiones algunas serpientes de gran tamaño pueden llegar a matar y comerse presas considerablemente grandes, en la literatura científica existen datos fehacientes de pitones reticuladas devorando cerdos salvajes e incluso un oso de collar, pitones de Birmania que han matado y devorado a un leopardo, pitones de Seba africanas que han devorado impalas y que incluso, en ocasiones, los pequeños cuernos de algún ungulado han sobresalido por los costados de la serpiente atravesando su estomago y piel para, una vez que el cráneo del mamífero ha sido digerido, caerse de la piel del reptil el cual sanó de sus heridas sin mayores complicaciones, tambien existen datos acerca de anacondas que han matado y devorado caimanes de 1. 80 metros o de boas constrictor que han devorado a un ocelote adulto.

 La imaginación popular ha creado mitos y leyendas sobre estos ocasionales banquetes no solo de tal manera que mucha gente cree que una anaconda va devorando presas enormes como ciervos adultos, caballos, bueyes, búfalos o bueyes ( y al nombre popular “Matatoro” de la anaconda me remito o a “Tragavenados” en el caso de la boa constrictor ) un dia sí y el otro tambien y ya para colmo está la leyenda urbana con la que últimamente hemos tenido que convivir todos en España y que incluso ha aparecido en televisión en boca de los siempre bien informados tertulianos de turno, para aquellos que no conozcan esta leyenda urbana diré que corre la voz desde hace tiempo atrás de que una persona, la cual es amiga de todo el mundo, ya que todo el mundo tiene un amigo al que le ha ocurrido esto, posee una boa constrictor en su domicilio y cuando le preguntó a un veterinario el por que la boa se situaba, cuando ambos estaban en la cama, estirada longitudinalmente junto al cuerpo de su dueño el veterinario respondió, “es que te está midiendo con su cuerpo para saber si se te puede comer”... me imagino que las historias cuanto más absurdas y ridículas son más se las cree la gente debido a la falta de información sobre este tema en particular no obstante es la historia más absurda, ridícula y propia de la invención de un completo cretino que he oído jamás, pretender que una serpiente, un animal dotado con un comportamiento netamente basado en su instinto, haga estos cálculos es igual de imposible que hacer que un chimpancé, por muy inteligente que sea, llegue a Saturno por medios propios y todavía resulta más ridícula cuando se sabe que las grandes constrictoras ocasionalmente matan presas a las que no se pueden comer debido a que son demasiado grandes o a que sus cuernos pueden resultar un peligro para el reptil, existen casos documentados de pitones de Seba que han tenido que abandonar cadáveres de Kudús jóvenes en el parque Kruger de Sudáfrica ya que les ha sido imposible devorarlos o de anacondas con pequeños ciervos a los que no se han podido comer, el fallo desde luego lo cometieron estos reptiles los cuales abarcaron demasiado y comieron más con los ojos que con la boca ( o quizá no supieron medir bien con su cuerpo al animal...) debido posiblemente al pobre sentido de la vista que caracteriza a las serpientes

Como ya he dicho las leyendas, mitos y estupideces abundan, no obstante rara vez se comentan las ventajas o inconvenientes de semejantes banquetes y las vicisitudes y peligros que pasan estos animales para poder ingerir semejantes presas, espero que estos comentarios sirvan para arrojar alguna luz sobre este tema.

Solo para hacernos una idea de lo que, al menos una serpiente de gran tamaño puede llegar a hacer con la fuerza de su cuerpo a la hora de cazar a una presa, aunque lo que paso a relatar a continuación desde luego no sea el comportamiento normal de ninguna especie de serpiente y no tienen nada que ver con su alimentación, puede verse en dos combates, por supuesto realizados para que ocurrieran ante las cámaras, en los que aparecen una pitón reticulada de gran tamaño la cual literalmente caza limpiamente a un leopardo negro o pantera negra Panthera pardus ante las cámaras a pesar de los esfuerzos, garras y colmillos del felino, el otro combate en el cual se usaron al menos 2 pitones reticuladas de diferentes tamaños tuvo como objeto filmar el combate a muerte entre una pitón y un tigre, cuando el tigre ataca al ejemplar más pequeño de pitón el resultado es claro a favor del felino, no obstante cuando este ataca a un ejemplar grande de pitón la cosa cambia y el combate resultante demuestra lo persistentes que llegar a ser estas pitones ya que simplemente el tigre no puede zafarse de la serpiente por más que salta y se revuelca para zafarse de ella y acaba llevando la peor parte en la pelea hasta que afortunadamente para él ambos contendientes deciden separarse sabiamente dando por terminada la lucha. De no haber ocurrido esto indudablemente el tigre hubiera perdido la pelea sin duda alguna, estas peleas pueden dar una idea de lo que una serpiente grande puede hacer a la hora de matar a una presa, no obstante debe decirse que peleas de este calibre ocurren muy raras veces a no ser que la propia vida corra peligro ¿ por y para que correr riesgos innecesarios ? pero desde luego ocurren, una prueba de esto es que en Nepal, en el parque nacional Corbett, fue encontrado el cadáver de un tigre subadulto de 2. 20 metros junto con el de su asesina, una pitón birmana de 5 metros, ambos contendientes murieron, posiblemente la causa de esta pelea a muerte fue que el tigre sorprendió y quiso cazar a la pitón la cual no necesitaba comer ya que tenía el cadáver de un jabalí en su estómago.

Sin embargo este tipo de peleas solo demuestran una cosa y es lo fuertes que llegan a ser estos animales y lo capacitados que están para derribar animales sumamente ágiles, rápidos y fuertes desde que estos reptiles salen del huevo y se alimentan de ratas hasta que alcanzan un tamaño medio de 3.5 a 4 ó 5 metros de longitud media en la adultez cuando se alimentan de toda una serie de presas de mediano o gran tamaño tan diversas como aves, puerco espines, chacales, perros, monos, etc para sobrevivir, solo una pitón o anaconda ciertamente grande puede afrontar el gran riesgo de devorar a una gran presa exitosamente sin sufrir heridas internas como desgarros estomacales o fractura de costillas cosa esta última que ocasionalmente ocurre, además, puede parecer que estos reptiles siempre salen triunfantes pero desde luego se arriesgan considerablemente con cada captura de un animal grande, baste citar el caso de una pitón india Python molurus molurus que rodó por los suelos durante alrededor de 45 metros junto con el antílope chinkara al que trataba de capturar antes de poder hacerse con su presa y matarla.

 Tigre contra pitón reticulada ¿ vosotros por quien

 apostaríais viendo esta foto ?

Foto: Origen desconocido.

         Todos estos datos y anécdotas están muy bien pero, ¿es cierto que las serpientes ya sean venenosas o no se alimentan continuamente de presas de gran tamaño? y ¿cuál es la mayor presa que ha ingerido una serpiente? Desgraciadamente muchos de los datos aportados a los estudios de alimentación de estos animales están basados en el hallazgo del reptil por parte de cazadores o exploradores en el acto de devorar al animal “in situ” o de encontrarlo con el estómago hinchado y matarlo para después abrirlo en canal para comprobar que se había comido y no en un seguimiento científico continuo de la alimentación del reptil en la naturaleza llevado a cabo por científicos con lo cual la información disponible es, como poco incompleta, ya que animales como un antílope rápidamente pasa a engrosar la lista de especies devoradas debido a su tamaño, sin embargo otros como una liebre o presas de tamaño similar han pasado desapercibidas debido a lo poco espectacular del hallazgo.

Sabemos que para una serpiente alimentarse de una presa grande tiene multitud de ventajas ya que desde luego una pitón que devora a una presa de buen tamaño ha ingerido de un solo golpe la comida necesaria para sobrevivir meses o casi un año debido tanto a la gran cantidad de alimento ingerido como a su bajo metabolismo, esto significa que este animal no necesitará cazar en mucho tiempo y no solo eso sino que si es una hembra podrá tener más éxito a la hora de reproducirse y realizar el terrible gasto energético de gestar o incubar montones de huevos o embriones debido a que está bien alimentada, ahora bien, ¿ cuales son los inconvenientes ? bueno, quizá uno de los primeros es la falta de agilidad que caracteriza a una serpiente con una gran presa en el estómago, si este animal es sorprendido por un depredador en estas circunstancias posiblemente no sea capaz de defenderse a tiempo, incuso aunque regurgite su comida, como prueba de esto baste decir que existe una serie de fotografías en las que se ve como un leopardo sorprende a una gran pitón de Seba digiriendo una gran comida bajo un arbusto y no tiene ningún problema en matar y devorar parcialmente a la serpiente sin que se produzca, a juzgar por las fotos, ni siquiera un conato de pelea por parte de la enorme pitón, además estos reptiles todavía tiene que resolver el problema de la termorregulación la cual la forzará a moverse de sitios frescos a cálidos dependiendo de la temperatura ambiente con lo cual será todavía más visible y vulnerable, otra desventaja es que a una presa grande hay que conseguir vencerla en un combate en el que si se usa la constricción la serpiente es muy vulnerable a la reacción defensiva de su presa ya que unos anillos mal colocados en una presa que forcejea pueden implicar que esta tarde en morir y pueda defenderse, no es de extrañar que en el caso de algunas de las grandes serpientes constrictoras como son las anacondas, los ejemplares hembras los cuales siempre son mayores que los machos y por lo tanto se alimentan de presas mayores, estén cubiertas de cicatrices de peleas con capibaras, caimanes, etc, esto las más afortunadas ya que sin duda algunas son heridas de muerte por la que iba a ser su siguiente comida, sin lugar a dudas la vida es dura y peligrosa hasta para una anaconda de 6 metros.

Esta Boa arco iris Epicrates cenchria necesitó 4 horas para poder

engullir la enorme rata que alberga en su interior, de haberlo hecho

en una selva sudamericana el riesgo de ser sorprendida y

muerta por un depredador se multiplica tanto a la hora de

ingerir como de digerir esta enorme presa.

Foto: Javier Carrasco.

En caso de que se utilice el veneno para someter a una presa la cosa cambia ya que una serpiente que muerde, envenena, libera a su presa en apenas un parpadeo y espera a que su comida muera corre menos peligro de resultar dañada pero aún así la serpiente corre riesgos todavía, baste citar el caso fehaciente de una taipán australiana Oxyuranus scutellatus que murió al recibir una mordedura en la cabeza de la rata que ella misma estaba mordiendo y hay que tener en cuenta que una taipán muerde a su presa y la suelta muy rápidamente, pero ¿qué ocurre con las serpientes venenosas que muerden y retienen a sus presas en la boca como ocurre con las culebras con dentición opistoglifa ( colmillos traseros ) o los elápidos que mantienen la mordedura cosa que tambien ocurre en algunos vipéridos ? posiblemente sucede lo mismo que con las serpientes constrictoras ya que siempre podrán ser mordidas en este proceso por sus presas, las cuales pueden llegar incluso a morderlas incluso en los ojos, si alguien me contase que una víbora del Gabón Bitis gabonica perdió un ojo mientras sostenía en alto a una rata “empalándola” en sus colmillos hasta que el veneno hiciese acción me parecería algo completamente veraz, este tipo de heridas pueden llegar a infectarse y debilitar o matar a un animal en la naturaleza, desde luego cazar es siempre una actividad peligrosa y las serpientes no son invulnerables o infalibles, sean venenosas o no, un buen ejemplo de las precauciones tomadas por algunas serpientes ante estas situaciones son las cobras reales las cuales mantienen la mordedura en otros elápidos de colmillos cortos o en las grandes culebras o pitones que devoran pero liberan a los vipéridos de largos colmillos mientras su veneno hace efecto ya que a pesar de que es inmune a su veneno estos colmillos pueden llegar a alcanzar algún órgano vital en el cuerpo de la cobra. La posibilidad siempre a tener en cuenta de que una serpiente acabe herida gravemente es uno de los mejores argumentos que conozco para alimentar siempre a las serpientes cautivas con presas previamente sacrificadas.

         Ahora bien ¿ cual es la mayor presa ingerida por una serpiente ? bueno, este record lo ostenta una pitón de Seba Python sebae la cual cazó y devoró a un impala de 59 kilos de peso y lo mejor de todo es que la serpiente medía “solo” 4.88 metros, un tamaño mediano – grande en esta especie pero que dista del potencial que raramente llegan a alcanzar con longitudes de unos 6 metros, ahora bien, si usamos este dato de ingestión como referencia y sabiendo que una serpiente puede devorar presas con un peso igual al 90 % de su propio peso algunos científicos han llegado a la conclusión de que una serpiente de 6 metros podría llegar a comerse una presa de más de 50 kilos de peso, no obstante y antes de que las imaginaciones se disparen y los mitos de serpientes devorando hombres adultos, bueyes, caballos, etc se vean confirmados debo decir que ninguna de las serpientes existentes alcanza esta longitud excepto en la adultez o la vejez y los 6 metros están muy por encima de la talla media que alcanzan estas especies en la naturaleza de modo que en cualquier estudio de población de estos animales estos gigantes son los más raros de encontrar, siendo más comunes los ejemplares más pequeños, los cuales incluso siendo grandes serpientes de entre 3 y 4 metros se alimentan más frecuentemente de presas de tamaño mediano o pequeño que grande.

La pitón de Seba africana Python sebae es la especie de serpiente

que ha ingerido la mayor presa documentada hasta ahora,

un impala de 59 kilos de peso.

Foto: Javier Carrasco.

         Indudablemente la noticia de una serpiente capaz de devorar a una presa que casi iguale el peso del reptil resulta sorprendente, no obstante parece ser que las serpientes siempre son capaces de sorprender a los seres humanos todavía un poco más ya que hace relativamente poco tiempo se hicieron varios descubrimientos sorprendentes en los estómagos de al menos 4 especies de serpientes pertenecientes a varias colecciones de museos, estas serpientes son la víbora de Fea Azemiops feae, la Macagua Bothrops atrox la Terciopelo Bothrops asper y otra víbora de fosetas una Trimeresurus montícola con presas enormes como es el caso de una musaraña, un lagarto, una escolopendra y un roedor respectivamente en su interior que llegaban a alcanzar y sobrepasar hasta en un 160 % el peso del reptil que los engulló superando de esta manera totalmente a las serpientes constrictoras gigantes en capacidad de ingestión, sin embargo y paradójicamente algunos de los ejemplares citados como es el caso de la Bothrops atrox y B. asper no eran particularmente grandes por no decir que eran más bien pequeños, de modo que lo que podría llegar a engullir  ejemplares adultos de más de 1. 50 está por verse ya que como acabamos de ver ahora se sabe a ciencia cierta que algunos crotálidos frecuentemente devoran presas más pesadas que ellas mismas.

Otras proezas alimenticias entre los gigantes venenosos han sido las realizadas por machos inusualmente grandes de cobras reales de más de 4 metros los cuales han matado y devorado pitones birmanas de alrededor de 2.4 metros e incluso un ejemplar de 3. 66 metros devoró a una pitón reticulada de 2. 8 m. o el caso de la al menos ocasionalmente ofiofaga mamba negra de 2. 90 metros que devoró a una cobra de selva Naja melanoleuca de 2. 25 metros o la víbora de Gabón la cual se sabe que ha devorado monos, liebres e incluso pequeños antílopes de tamaño similar al del citado roedor o el caso de los enormes pollos de pardela, un ave marina, devorados por las serpientes tigre de la isla Chappell en la costa australiana o los conejos cola de algodón devorados por las cascabeles lomo de diamante Crotalus adamanteus en Norteamérica, sin embargo y paradójicamente se sabe que otros gigantes como la bushmaster de la costa atlántica Lachesis muta rhombeata la cual supera raramente los 2 metros se alimenta básica y muy frecuentemente de pequeños roedores de alrededor de 200 gramos ya que el clima más bien frío de la zona donde vive haría la digestión de presas más grandes como los agutís, pacas o grandes ratas peligrosa para el reptil de modo que se ve forzada a sobrevivir a base de presas pequeñas que puede digerir rápidamente en un ambiente frío.

Ya para terminar, nunca debemos olvidarnos de las modestas en tamaño aunque no menos impresionantes por sus habilidades alimenticias serpientes devoradoras de huevos Dasypeltis cuya habilidad para ingerir huevos más grandes que el diámetro de su cuerpo para posteriormente romper la cáscara mediante unas vértebras especializadas y digerir su contenido alimenticio, esto se hace después de determinar mediante el olfato la frescura del dicho huevo, toda una proeza para una pequeña serpiente, cuyas “hermanas y primas” de todo el mundo sólo matan para comer y lo hacen poco debido a su bajo gasto metabólico como reptiles que son, a los periodos de hibernación y estivación anuales o a los cambios de piel durante los que no comen, ¿ podemos nosotros los auto nombrados seres racionales e inteligentes decir lo mismo?