La vibora de Russell Daboia russelii.

Tradicionalmente, las serpientes son veneradas y respetadas ( aunque no por todo el mundo ) como iconos religiosos en países como la India debido en gran parte a la acción de religiones como el Hinduismo o al Budismo en el caso del Sudeste de Asia, pero a pesar de todo este respeto parece ser que al menos una especie era - y posiblemente es – más temida que venerada por muchísimas personas ya sea con o sin razón.

Se trata del mayor vipérido genuino ( sin fosetas termorreceptoras ) que habita en la India y el Sudeste de Asia y a pesar de que puede llegar a compartir ciertos países con otras especies de víboras sin fosetas como son la gran Víbora del Levante Macrovipera lebetina o con la víbora de Fea Azemiops feae estas otras especies no son, ni remotamente, tan importantes a niveles de mortalidad o morbilidad humana a lo largo de toda su distribución geográfica como lo es la especie aquí tratada la cual es llamada a lo largo de su área de distribución con muchos nombres diferentes sin embargo fue su nombre en lengua en Hindi “ Daboia “ palabra que significa “ la que se oculta o acecha “ el que le ha dado el nombre científico a esta especie y al género que la engloba, sin embargo su nombre común, en cambio, vino dado en honor al Herpetólogo Escocés Patrick Russell.

Históricamente esta especie estuvo antaño emplazada dentro del género Coluber y Vipera hasta que fue trasladada taxonómicamente hablando al género monotípico al que pertenece hoy en día Daboia. Varias subespecies, 6 en total, fueron reconocidas en base a las diferencias morfológicas que esta especie sufre a lo largo de su gran distribución geográfica, no obstante y a pesar de toda esta clasificación taxonómica todas estas subespecies han sido invalidadas y hoy en día se considera que la víbora de Russell actualmente cuenta con 2 especies conocidas como Daboia russelii y Daboia siamensis.

Las 2 especies están distribuidas geográficamente - en el caso de Daboia russelii - a lo largo de la India, Pakistan, Nepal, Bangladesh y Sri lanka y en el de Daboia siamensis por Myanmar, Camboya, Sur de China, Taiwan, Nepal, Tailandia y algunas islas de Indonesia como son Komodo, Flores, Java y Lomblen. La manera más fácil de diferenciar a una especie de la otra es que Daboia russelii posee tres hileras longitudinales de ocelos ( una hilera en el dorso y una en cada costado ) mientras que Daboia siamensis posee el mismo patrón pero con manchas oscuras entre dichos ocelos del dorso y ambos costados, ambas especies poseen escamas pequeñas en la cabeza las cuales al igual que ocurre con las del cuerpo son carenadas. Tambien existe una diferencia en cuanto al tamaño alcanzado ( en estas especies los machos son más grandes que las hembras ) ya que Daboia russelii es más grande que su pariente cercano llegando a alcanzar el 1. 85 metros de longitud máxima ( la mayoría de ejemplares adultos miden de 1 - 1. 20 m ) y su pariente cercano parece ser que alcanza el 1. 5 metros pero rara vez supera el metro de longitud con los ejemplares que viven en islas siendo los más pequeños. Otro rasgo distintivo exclusivo de estas especies y que las diferencia de cualquier otra serpiente son las grandes narinas u orificios nasales que poseen, por lo demás estas víboras poseen ojos dotados con pupilas verticales y son de hábitos mayoritariamente nocturnos siendo rara vez encontradas activas durante el día y a pesar de que son de costumbres terrestres llegan a nadar y trepar por árboles o arbustos con facilidad.

Estas víboras son ciertamente prolíficas con las hembras dando a luz ( reproducción ovovivípara ) camadas de 20 a 40 viboreznos aunque se conocen casos de hembras que han llegado a alumbrar hasta a 63 crías, en la India la época en que se producen los partos va del mes de Mayo a Julio mientras que en islas como es el caso de Komodo ( famosa por su dragón ) han sido recolectados ejemplares neonatos en Enero. En ambas especies las pequeñas víboras miden al nacer de 11 a 25 cm y son considerablemente más agresivas que sus parientes de mayor tamaño debido, posiblemente, a que sufren una considerable depredación por parte de varanos, mangostas, aves de presa y posiblemente otras serpientes.

En cuanto al habitat que ocupa,esta especie parece evitar tanto las densas selvas como las zonas permanentemente inundadas siendo prioritariamente una especie que habita en zonas llanas cubiertas de hierba o matorrales aunque puede ser encontrada desde en colinas rocosas a áreas de montaña hasta a 3000 metros de altitud o incluso cerca de zonas costeras. Tambien parece adaptarse estupendamente a las zonas alteradas por el hombre y puede resultar común en los alrededores de ciudades o pueblos donde llega incluso a introducirse en las casas en su búsqueda de roedores ( aunque menos de lo que lo hacen las cobras o los Kraits ) o en zonas de cultivos como arrozales y otros tipos de cultivos.

La alimentación de los ejemplares recién nacidos o juveniles está basada en presas pequeñas de modo que atacan a cualquier presa de tamaño adecuado que se pone a su alcance ya sean pequeños escorpiones, escarabajos u otros animales e incluso a cangrejos terrestres, en cambio los adultos parecen tener una alimentación más basada en roedores como ratas, ratones, gerbos o ardillas aunque también consumen ranas, aves, lagartos y otras serpientes ( se han dado casos de canibalismo entre los ejemplares juveniles ), dichas presas son cazadas al acecho y mediante una fulminante mordedura que las deja rápidamente fuera de combate.

A pesar de su mala fama esta víbora no es un animal agresivo en el sentido estricto de la palabra y solo se defiende cuando es molestada, atacada o pisada accidentalmente siendo por lo demás una especie de movimientos lentos, ahora bien, un ejemplar de esta especie realmente enfadado o acosado es un animal ciertamente temible el cual no duda en defenderse lanzándose a morder todo lo que se mueva a su alrededor, no obstante y ante un encontronazo con una persona el comportamiento típico por parte de esta especie para evitar una confrontación consiste en adoptar una postura de ataque, hinchar el cuerpo de aire y expulsarlo de manera realmente ruidosa por las grandes narinas que esta especie posee en forma de trompeta, este aviso sonoro es difícilmente ignorable debido a su potencia y solo en caso de que siga siendo molestada la víbora puede proceder a intentar morder de manera rápida y violenta, aunque si se la deja tranquila lo más fácil es que corra a esconderse.

Lamentablemente factores como la superpoblación humana y sus cada vez más frecuentes plantaciones, la industria peletera y la medicina tradicional asiática ponen en contacto cada vez más frecuentemente a esta víbora con el ser humano de manera trágica para ambas especies, esto unido a las poblaciones de estas víboras las cuales pueden ser muy abundantes en algunas zonas de su distribución geográfica o muy escasas en otras y ciertamente frecuentes en algunas zonas cultivadas hacen de ella una de las especies que más personas envía al hospital tanto históricamente como actualmente en países como la India o el Sudeste de Asia hasta el punto de que ya en la época colonial en la India era considerada como una de las serpientes más peligrosas, por otra parte en Myanmar ( antigua Birmania ) las mordeduras de serpiente estaban consideradas como la quinta causa de mortalidad en el país e incluso hoy en día el 90 % de los accidentes están ocasionados por Daboia siamensis la cual supo adaptarse perfectamente desde hace más de un siglo a la vida en los arrozales con el consecuente contacto con el hombre y de ahí a que un trabajador descalzo termine pisando o situando las manos de manera súbita demasiado cerca de una serpiente que está descansando y permanece quieta y perfectamente camuflada y que no ve hasta que es demasiado tarde hay solo un paso.

Históricamente y ante este nivel de mordeduras y muertes humanas ya en países como Myanmar y en el año 1882 en la zona arrocera del distrito de Tharawaddy se tomaron medidas como ofrecer recompensas por cada serpiente muerta entregada a las autoridades y el número de serpientes cazadas en un año ( desde el año 1911 al 1912 se capturaron 81. 251 ejemplares ) puede dar una idea de la gran cantidad de estas serpientes, al menos históricamente, que puede llegar a habitar en una zona, otra medida adicional fue tomada por parte de los trabajadores de los arrozales los cuales intentaban evitar las mordeduras vistiendo zapatos de hierbas entretejidas pero paradójicamente y en ocasiones las nefastas creencias populares jugaron en contra de la gente ya que se creía que vestir este tipo de calzado protector ofendería a las serpientes haciendo que mordiesen a las personas más a menudo...

Con la creación y uso del suero antiofídico las mordeduras pudieron ser tratadas y muchas vidas se están salvando pero incluso así esta especie en particular resulta problemática debido a que su veneno varía regionalmente de manera muy notable en la sintomatología que causa en víctimas humanas haciendo que el antídoto adecuado para una zona o país sea totalmente ineficaz en otras zonas, por ejemplo, el producido en la India es totalmente ineficaz en la vecina Sri Lanka, sin embargo el producido en Myanmar es válido para las mordeduras producidas en Tailandia y en la India ( al menos contra el veneno de serpientes de algunas regiones no especificadas ).

En cuanto a su sintomatología dichos venenos, al variar fuertemente en su composición geográficamente, generalmente producen a lo largo de su distribución geográfica una reducción en la capacidad de coagulación sanguínea y fallo renal, pero sin embargo tambien pueden producirse otros síntomas ya que , por ejemplo, en Sri Lanka las víctimas muestran efectos de neurotoxicidad ( así como rabdomiolisis y hemólisis intravascular ) al igual que en el sur de la India, en Myanmar los heridos muestran permeabilidad capilar y shock mientras que en Tailandia se producen mayoritariamente casos de hemólisis intravascular y reducción en la capacidad de coagulación sanguínea. Otros síntomas adicionales como edema cerebral o hemorragias en glándula pituitaria situada en el cerebro son conocidos.

Si bien esta especie está considerada como la pesadilla de los cultivadores de arroz, ya que este es el colectivo que más sufre sus mordeduras, los accidentes que ocasiona son claramente estacionales y siguen un marcado patrón anual sucediendo tanto al producirse las inundaciones propias del Monzón ( cuando las serpientes buscan terrenos elevados huyendo de las crecidas ) como durante la época de recolección del arroz ( cuando grandes cantidades de seres humanos invaden los campos ), indudablemente estos arrozales y concretamente sus márgenes con forma de diques de arena son lo más parecido a un hotel con servicio de habitaciones para estas víboras debido a la enorme abundancia de roedores que allí proliferan siendo además un lugar con multitud de madrigueras de ratas para ocultarse y con agua disponible de modo que no es de extrañar que gran parte de los accidentes ocurran entre los recolectores de arroz los cuales son mordidos cuando caminan descalzos en dichos diques, recogen el arroz o arrancan las malas hierbas. Para evitar dichos accidentes a primera vista la medida ideal para librarse de estas serpientes sería eliminarlas, sin embargo la extinción local de estas serpientes u otras simplemente resultaría enormemente perjudicial para las cosechas ya que, paradójicamente, las relaciones del agricultor con las serpientes son más complejas de lo parece a primera vista y el “ verdugo ” del agricultor de arroz es el mejor aliado que posee contra el hambre ya que acaba con la vida de multitud de roedores anualmente protegiendo así las cosechas y evitando que familias o pueblos enteros pasen hambre.

Ante esto y la permanente escasez de sueros antiofídicos la mejor forma de prevenir los accidentes es usando una barrera contra sus mordeduras y ¿ que mejor que unas simples botas de goma a prueba de mordeduras que protejan pies y tobillos ? en Myanmar y durante la década de los años 90 se tomó la iniciativa de fabricar y vender botas a prueba de mordedura de forma barata y asequible a la economía de los agricultores, medidas preventivas como esta indudablemente hacen decrecer el número de víctimas y hacen que exista una mayor cantidad de sueros disponibles para aquellas personas que realmente lo necesitan combatiéndose así la permanente carencia de sueros.

Esta especie no es solo una serpiente con mala fama causante de accidentes sino una pieza clave de su ecosistema y, aunque nos duela admitirlo, indirectamente responsable de la conservación y productividad de las zonas destinadas a la agricultura en zonas donde el hambre es una realidad ya que sin ellas los roedores proliferan desmesuradamente acabando con las cosechas, pero por otra parte también es una especie potencialmente amenazada ya que es utilizada de manera usual en la medicina tradicional asiática donde miles de estas serpientes son servidas en restaurantes o se utilizan su sangre o sus órganos para efectuar supuestas curas medicinales y, además, la piel de esta especie es muy utilizada en la industria peletera existiendo poblaciones que fueron totalmente erradicadas en la India o Tailandia por el abuso en los ejemplares capturados con lo cual esta especie está incluida en el apéndice III del CITES.

Antaño esta especie fue la responsable de que la medicina diese con los factores de la coagulación sanguínea y hoy en día su veneno es usado en pruebas relacionadas con la coagulación de la sangre y quizá en muchas más investigaciones médicas que benefician al ser humano. Indudablemente nos interesa, a pesar de los accidentes que causa, que la víbora de Russell siga entre nosotros debido tanto a su acción controladora sobre los roedores en zonas susceptibles de hambrunas o enfermedades como por las aplicaciones médicas de su veneno.