sábado, 26 de enero de 2013

Fuga del terrario.



Dentro de la tenencia en hogares de serpientes venenosas existen, al menos bajo mi punto de vista, 3 grandes miedos ocasionados por 3 grandes riesgos:

El primero es que tu mascota te muerda, el segundo radica en que el animal se fugue y vague libremente por tu casa y el tercero, aunque no menos importante, es que se fugue y muerda a alguien y esto, a pesar de que estos animales NO quieren morder a nadie, imaginemos que dicho animal se vea en una situación en la que crea que defenderse es necesario y obre en consecuencia, tratad de imaginaros la no tan fantasiosa situación en la que una digamos víbora arborícola del bambú asiática tan frecuentemente mantenida por aficionados consigue colarse por debajo de la puerta de tu casa y acceder a la escalera de tu bloque de apartamentos y alguien que sube o baja dicha escalera totalmente despistado la pisa accidentalmente...

Indudablemente cualquiera de estas tres situaciones son un riesgo constante con el que el tanto el profesional como el aficionado que poseen estos animales deben correr cotidianamente aunque, personalmente, debo decir que no se cual de las tres me pone más “ los pelos de punta “, no obstante y dado que en este caso vamos a tocar el tema de las consecuencias de una fuga he decidido incluir un caso ya antiguo pero que todavía puede encontrarse en la Web donde fue publicado, entre otros, por el periódico digital alemán Spiegel Online International en su edición del 22 de Marzo del 2010.

Primero y antes que nada debe aclararse que una serpiente, a pesar de ser animales vertebrados, es un animal capaz de fugarse por agujeros de diámetro inusitadamente pequeños o por rendijas sumamente estrechas por lo que recomiendo a cualquier persona que posea uno o varios de estos reptiles que extreme las precauciones para evitar en todo lo posible la fuga de su mascota, ya que tener que buscar una serpiente en una casa puede resultar una verdadera pesadilla y si resulta que es un ejemplar pequeño esto es todavía peor ya que puede esconderse en cualquier parte  y mejor no hablar si para más INRI resulta que el ejemplar es pequeño y venenoso, con lo que las consecuencias pueden agravarse a cada minuto que pasa y que el animal está suelto ya que buscar una serpiente en una casa es como buscar una aguja en un pajar y encontrarla es algo que requiere su tiempo y posiblemente mucho.

Volviendo al caso ocurrido en la ciudad Alemana de Mülheim, allí se dio una de las cacerías de serpientes más largas de la historia, todo comenzó cuando un joven de 19 años de edad llamado Kevin O. decidió adquirir una pequeña cobra como mascota, sin embargo el ejemplar de 3 meses de edad de Naja kaouthia que compró tenía otros planes y así se lo hizo saber a su dueño cuando decidió fugarse de su terrario, solo para hacernos una idea del lugar donde todo esto ocurrió diré que fue en una casa que, aparte del ático donde vivía Kevin, poseía otros 2 apartamentos con gente viviendo en su interior.

Ante sus infructuosos esfuerzos por encontrar a la pequeña cobra, Kevin decidió avisar a las autoridades de la fuga del reptil venenoso y allí fue donde los bomberos realmente averiguaron lo difícil que resulta encontrar a una serpiente fugada ya que su búsqueda resultó infructuosa a pesar de que literalmente desmontaron las paredes, el suelo y el techo del apartamento, un equipo de construcción revisó los escombros de dichos elementos de la casa pedazo por pedazo buscando al reptil e incluso se llegaron a usar micro cámaras para visualizar los lugares más inaccesibles de la estructura del apartamento y se cubrieron de cinta adhesiva de dos caras varias superficies para que el reptil se quedase allí atrapado sin poder moverse, mientras tanto y por motivos de seguridad se optó por evacuar el edificio entero ( esto significó tener que alojar a los otros dos vecinos de Kevin y posiblemente a sus familias en otro lugar ) y a pesar de todos estos esfuerzos, los cuales duraron 8 semanas, la pequeña cobra finalmente no fue encontrada y tras el paso del tiempo posiblemente moriría de hambre.

Sin embargo y a pesar de que la posesión del pequeño elápido era legal por parte de su ex propietario ya que seguramente poseía una licencia para ello y era mayor de edad, un segundo disgusto le esperaba a Kevin aparte del ocasionado por haber perdido a su mascota, ya que la factura solo por el trabajo de los bomberos ascendió a 40.000 Euros ( la noticia no especifica la cantidad a pagar al resto de personal que colaboró en la búsqueda ) y lo que pediría el propietario del edificio por tener que reconstruir su interior y me imagino que los otros dos inquilinos también tendrían algo que reclamar en todo esto.

Personalmente, no me gustaría para nada tener que verme o ver a alguien en esta situación, pero opino que cualquier persona cuya serpiente venenosa se fugue y no declare la huida del animal merece la peor de las sanciones debido a que aunque cualquier persona puede tener un encontronazo con el animal tambien resulta muy fácil que los primeros en encontrarse con el animal sea los niños que juegan en cualquier barrio y ante esto...

Por estas razones y por que hasta los más profesionales cometen errores y se dejan un terrario abierto, una vez más mucho cuidado con las serpientes venenosas como mascota.

viernes, 18 de enero de 2013

Mamba negra. Dendroaspis polylepis.



        Si existe una serpiente globalmente conocida, aunque solo sea de oído, esa es la mamba negra Dendroaspis polylepis, tanto es así que en el continente africano donde habita su nombre ( por encima del de cualquier otra serpiente venenosa) se asocia con la muerte y va de boca en boca en medio de historias terribles relacionadas con su crueldad, saña, velocidad y terrible veneno. Quizá sería bueno plantearnos que la historia natural de este legendario elápido se ve demasiado a menudo a través de un velo tan negro como lo es el interior de su boca, de manera que voy a intentar ofreceros una visión más objetiva y también de desmitificar, en la medida de lo posible, a esta serpiente tan conocida por todo el mundo por su nombre pero a la vez tan desconocida por todos en lo tocante a su interesante historia natural en este post particularmente largo, cosa que espero que disculpéis, pero que finalmente espero que os guste.

         Las mambas negras son serpientes de gran tamaño, de hecho son la segunda especie de serpiente venenosa más grande del mundo después de la cobra real, ya que – supuestamente - ha llegado a alcanzar una longitud de 4. 20 metros, no obstante semejante longitud parece ser errónea y debe estar basada posiblemente en la medición de alguna piel estirada, con lo que la mayor mamba negra cuya longitud fue tomada correctamente llegó a alcanzar “solo” unos 3. 5 metros y como siempre ocurre la longitud media de esta especie es menor que todo esto siendo de alrededor de 2 a 2. 7 metros. El nombre mamba negra resulta inapropiado ya que esta especie nunca es negra, solo sus mucosas bucales lo son, de modo que un nombre común como “mamba de boca negra” resulta más apropiado, en realidad su coloración suele ser de color verde oliva o gris metal oscuro con algunos ejemplares luciendo líneas desdibujadas de color más oscuro en la parte trasera del cuerpo, por otra parte el cuerpo de esta especie es largo y esbelto, está dotado con escamas lisas y una cabeza cuya forma rectangular ha sido definida como “ en forma de ataúd “ hasta la saciedad, los ojos son negros, de buen tamaño y están dotados de pupilas redondas adaptadas al modo de vida de esta especie, esto es, diurno.

         En su distribución geográfica esta especie ocupa gran parte del África subsahariana ya que vive en Angola, Botswana, Burkina Faso, Camerún, Republica Centro Africana, Congo, Eritrea, Etiopía, Kenya, Malawi, Mali, Mozambique, Namibia, Somalia, Sudáfrica, Tanzania, Uganda, Zambia, Zimbabwe, Senegal y Guinea. Su hábitat suele ser las sabanas salpicadas de grandes arbustos y acacias africanas, los bosques ribereños no demasiado densos e incluso zonas costeras arboladas pero nunca en zonas boscosas densas y es allí donde suele establecer su residencia buscando un refugio bajo la forma de termitero abandonado, un agujero en el tronco de un árbol o incluso una madriguera subterránea de otro animal abandonada en la cual, salvo que su refugio se vuelva inseguro debido a la invasión humana o la comida escasee en los alrededores, la mamba residente disfrutará de su seguridad durante años. Esta serpiente, al contrario que las otras 3 especies de mambas verdes, las cuales son mayormente arborícolas, es una especie predominantemente terrestre la cual, además, trepa por rocas altas o sube a los árboles y se desplaza por sus ramas de manera magistral siendo además una excelente nadadora.

         Una característica notable de esta especie es su forma de desplazarse por campo abierto cosa que hace con la cabeza bien levantada del suelo para guiarse por su excelente sentido de la vista o para encontrar a sus posibles presas desde cierta distancia, sin embargo, lo más notable en cuanto a sus desplazamientos es la velocidad que llega a alcanzar ya que, a pesar de que se la han adjudicado velocidades mucho mayores, esta especie puede llegar a desplazarse a una velocidad máxima de unos 15 km / hora - posiblemente durante trechos cortos - con lo cual es la serpiente más veloz del mundo. El motivo de esta velocidad posiblemente es debido a que se trata de una cazadora activa que recorre su territorio buscando a sus presas las cuales suelen ser mamíferos de tamaño pequeño con los roedores como una de las presas más consumidas aunque otros mamíferos como murciélagos, ardillas, damanes de las rocas o musarañas tambien son atacadas e igualmente lo son las aves del tamaño de palomas o tórtolas y, aunque raramente, los reptiles también entran en el menú, al menos bajo la forma de otras serpientes de manera ocasional. Para cazar a sus presas las mambas utilizan siempre una sola y rápida mordedura que difiere de la de otros elápidos en el hecho de que el reptil muerde y libera a su presa muy rápidamente no necesitando mantener la mordedura durante mucho tiempo.

         Cuando salen del huevo donde se incubaron las pequeñas mambas miden alrededor de 40 a 60 cm y son aproximadamente del grosor de un lápiz, por supuesto son réplicas en miniatura de sus progenitores y muy capaces de propinar una mordedura letal para un animal mayor que ellas en tamaño y peso y desde luego necesitarán su veneno para cazar, defenderse y sobrevivir en su hábitat ya que existe una multitud de animales incluyendo aves rapaces, cigüeñas, pájaros secretarios, etc que se las comerán en cuanto tengan la menor oportunidad y luego están los mamíferos y otros reptiles, como los varanos u otras serpientes, que harán lo mismo garantizando que solo unas pocas mambas de cada camada puesta por las hembras, las cuales suelen constar de 9 a 14 huevos, llegue a convertirse en una mamba adulta. Afortunadamente para las recién nacidas el crecimiento de esta especie es notablemente rápido, al menos en cautividad, ya que se demostró como una cría puede llegar a alcanzar en condiciones idóneas de temperatura y con toda la comida que pueda engullir una longitud de 1. 82 metros en su primer año de vida, quizá con este tipo de crecimiento tenga que ver el notable hecho de que el proceso digestivo es extremadamente rápido en esta especie la cual es capaz de digerir una rata en solo 8 ó 10 horas. Indudablemente en la sabana hay que crecer cuanto antes ya que ser pequeño resulta sumamente peligroso, aunque uno sea una rápida y venenosísima mamba negra, no obstante, alcanzar un gran tamaño en la madurez no garantiza a esta especie la carencia total de depredadores.

         Varios factores contribuyen a convertir a la mamba negra en una de las serpientes más letales del mundo ya que como hemos visto antes son grandes, muy rápidas, ágiles y por otra parte sus colmillos difieren notablemente de los de la mayoría de los otros elápidos como son las cobras, serpientes coral, kraits, etc, ya que son notablemente más largos ( 6.5 mm en ejemplares adultos ), finos, curvos y además gozan de cierta movilidad y esto las capacita para realizar mordeduras muy rápidas similares a las de los viperidos, no obstante eso no es todo, ya que como tambien hemos visto antes una mamba que caza solo muerde una sola vez pero si la serpiente se encuentra en la situación hipotética de que ya ha mordido una vez defendiéndose de lo que considera una agresión pero considera que la amenaza hacia su persona continúa efectuará varias mordeduras más en rápida sucesión inoculando así dosis masivas de veneno a su enemigo, para hacernos una idea de lo que esto significa diremos que en una sola mordedura son inoculados de 100 a 400 mg de veneno de los cuales se estima que solamente de 10 a 15 mg son ya una dosis letal para un hombre adulto ( la LD 50 es de 0. 28 mg / kg ) dicho veneno es de acción neurotóxica / cardiotóxica y resulta de acción muy rápida pudiéndose presentarse los primeros síntomas de neurotoxicidad pasada media hora de la mordedura e incluso mucho antes, de modo que si no se produce una mordedura seca o la serpiente inocula una dosis ínfima de veneno las posibilidades de sobrevivir a una sola mordedura de esta especie son ya muy escasas ya que se comprobó como en 7 casos de mordeduras ocurridos en Sudáfrica el 100 % fueron letales, así pues, si el accidentado no recibe tratamiento lo antes posible con copiosas dosis de antiveneno ( cantidades de hasta 100 cm cúbicos no son inusuales ) posiblemente estará condenado e incluso recibiendo sueros posiblemente necesite respiración asistida. Entre los síntomas que se producen en caso de envenenamiento se cuentan el hormigueo en la lengua y labios, dificultades para abrir los ojos, la boca o para sacar la lengua, fasciculaciones (contracciones musculares involuntarias ) así como una parálisis descendente y progresiva, también se producen dolores abdominales, mareos, sudoración copiosa, nauseas, vómitos, diarreas y salivación excesiva, finalmente la muerte se produce por asfixia al paralizarse el diafragma.

         Con fama de nerviosa y de que no duda en defenderse si es acosada, perseguida o sorprendida incluso una mamba negra mostrará, si puede, un comportamiento intimidatorio destinado a evitar morder el cual consiste en abrir la boca ampliamente exhibiendo sus mucosas bucales negras, alzarse del suelo, bufar y abrir un capuchón en su cuello mucho más estrecho que el de sus parientes las cobras, si ante este despliegue la hipotética persona que ha sorprendido al reptil permanece inmóbil la serpiente se calmará y huirá pero si se mueve el ataque, si es que se produce, será rápido con la serpiente mordiendo alto ( en el caso de los grandes ejemplares por encima de la cintura de su agresor ) y desde una distancia considerable. Para finalizar con los detalles truculentos mencionaré el que quizá es el mejor ejemplo de lo que es capaz de hacer una de estas serpientes cuando es atacada y es el hecho de que cuando 4 ó más perros que formaban parte de una partida de caza han descubierto a una mamba negra y se han lanzado ciegamente a cazarla la serpiente ha terminado muerta y despedazada después de la tremenda refriega pero pasado cierto tiempo todos los perros han terminado sucumbiendo a su mordedura uno detrás de otro. No obstante y a pesar de todo esto, nunca debemos olvidar que la reacción típica de esta especie radica en huir a toda velocidad a esconderse o quedarse quieta confiando en pasar desapercibida, el resto de lo aquí dicho son casos anecdóticos, puntuales y que no suceden todos los días, pero a pesar de todo una cosa está muy clara: mucho cuidado con acorralar a una mamba negra.

         Si nos centramos en todos estos detalles escabrosos no es de extrañar la mala fama que precede a esta serpiente en África, pero la pregunta es: ¿ se la merece ? bueno, quien conoce bien a esta especie la califica como tímida, huidiza y perpetuamente alerta ante lo que la rodea lo cual la lleva a esconderse rápidamente mucho antes de que cualquier ser humano que camine cerca ni siquiera la vea y de hecho esto es lo que suelen hacer, por otra parte no resulta raro que una mamba se acerque a un poblado atraída por los abundantes roedores o incluso que se cuele en las chozas ( o en Bungalows ) persiguiéndolos y aunque esto la puede poner peligrosamente en contacto con el hombre curiosamente y como ya comenté con anterioridad en este blog, se sabe de mambas negras que han vivido posiblemente durante años en buhardillas de casas ( a juzgar por la gran cantidad de pieles mudadas que allí había ) sin que el propietario de la casa ni sus vecinos ni siquiera sospechasen su presencia, tal es la discreción y el sigilo del que hacen gala estos reptiles y por otra parte tenemos el testimonio de cazadores como C. J. P Ionides, quien en el siglo pasado capturó unas 200 mambas negras ( incluidos ejemplares de 3. 20 metros de longitud ) sin sacar a relucir nunca el carácter agresivo de la especie sino su falta de agresividad y esto a pesar de lo comprometido de la situación en la que se encontraban dichos reptiles siendo capturados, los cuales y a pesar de su mala fama, simplemente querían permanecer ocultos en sus escondites negándose a abandonar su seguridad a toda costa y no atacaban incluso cuando para hacerlos salir se les empujaba o zarandeaba, de hecho según Ionides solo algunos ejemplares intentaron morder pero solo cuando eran manipulados y la opción de huir era ya imposible.

         ¿Entonces ante que estamos al fin y al cabo, ante el monstruo que persigue a la gente a la carrera para morderla, mata a familias o vacía poblados africanos enteros según cuentas las leyendas e historias de terror o ante un animal que corre a esconderse ante la presencia del hombre ?. Indudablemente una cosa está clara, que la mamba negra es, potencialmente, una especie peligrosa que si es acosada se defenderá sin dudarlo con las armas que posee pero que sin embargo en realidad es tímida y huidiza y solo usa su veneno cuando se siente atacada y para cazar, de modo que no resulta necesario ni justo seguir exagerando con lo que se cuenta sobre este animal aumentando cada vez más la mala fama de esta serpiente. Quizá va siendo hora de ver a este “demonio” africano de boca negra como lo que es en realidad y desde un punto de vista menos emotivo, un animal dotado con una serie de cualidades magníficas que la han adaptado perfectamente a la vida en las llanuras africanas y cuyo camino se cruza cada vez más en su perjuicio con el del sobreabundante ser humano cada vez más presente en su habitat.

Serpientes venenosas mascota. ¿ El ascenso dentro de la afición ?



          A pesar de su mala fama en todo el mundo las serpientes resultan animales “ adictivos “ entre las personas que descubren o ya sabían de antemano que estos reptiles u otros pueden llegar a resultar unas buenas mascotas ya que  entre algunas de sus cualidades destacan una innegable belleza, requieren un nivel de atención bajo por parte de su cuidador en tiempos donde la gente cada vez necesita trabajar más horas y tiene poco tiempo libre y la nada desdeñable posibilidad de poder irte de vacaciones tranquilamente 15 días sin que a la serpiente le pase absolutamente nada malo habiéndola dejado previamente un suministro de agua ( asunto este último que ya querrían para ellos los dueños de perros, gatos y otros animales domésticos )



         El tremendo auge que están sufriendo los reptiles como mascotas y la fascinación que ejercen estos animales es tan fuerte que muchos aficionados a la terrariofília pueden llegar a mantener ciertas cantidades de colúbridos no venenosos en una sola habitación de su casa en terrarios perfectamente acondicionados para los animales cuyo ciclo cotidiano de luz y temperatura es controlado por temporizadores, termostatos y otros aparatos cada vez más accesibles dado lo creciente de esta afición a mantener reptiles en las casas, hasta aquí todo bien siempre y cuando estos animales lleven una vida digna y si son nacidos en cautividad todavía mejor y a todo esto hay que sumarle el nada despreciable hecho de que estos animales no suponen el menor peligro ni para sus propietarios ni para sus vecinos



Sin embargo algunas personas dentro de estos aficionados ( por supuesto no todos ) después de algún tiempo comienzan a notar que mantener en casa falsas corales, boas o pitones de varias especies ya no resulta suficiente y terminan deseando subir el listón hacia especies venenosas, por supuesto a muchos les frena la prudencia, el miedo y el sentido común, pero no a todos ellos. De modo que el siguiente paso para iniciarse en el mantenimiento de ofidios venenosos, aunque no seguido por todo el mundo, consiste en iniciarse con serpientes agresivas no venenosas de difícil manipulación o especies dotadas con venenos moderados, lo cual conlleva dos pasos que considero negativos, el primero consiste en deshacerte, en mayor o menor medida, de tus anteriores animales inofensivos y el segundo conseguir otro u otros nuevos de carácter agresivo y difícil manejo los cuales serán frecuentemente manipulados como un sistema para coger práctica y experiencia por su dueño el cual tiene la mente en otros animales.  Esto desde luego implica que la vida en cautividad de dichos animales no será todo lo tranquila que sería deseable y que pasado cierto tiempo, si sobreviven a este trato de estrés y manipulaciones, serán posiblemente también descartadas como mascotas, lo cual en ambos casos personalmente no creo que sea lo más correcto de ninguna de las maneras.

Si el futuro poseedor de serpientes venenosas con la mente llena de serpientes de cascabel, cobras, etc ha elegido como primer paso para conseguir experiencia en su futuro trato con ellas a los colúbridos dotados con dentición opistoglifa con estos animales ya se arriesga a recibir una mordedura por parte de serpientes cuya seriedad nadie sabe a ciencia cierta que consecuencias tendrá, ya que si tomamos como ejemplo el veneno de especies muy comúnmente mantenidas ¿ quien sabe a ciencia cierta las consecuencias de recibir una buena mordedura por parte de una Boiga dendrophila ?. Indudablemente con este tipo de serpientes mucha gente que es mordida apenas resulta inoculada por parte de estos animales debido tanto a la posición trasera o relativamente trasera de sus colmillos como a que consiguen retirar de la zona mordida al animal antes de que dicha inoculación ocurra, con lo que todo suele terminar con unos cuantos arañazos o con síntomas locales de escasa gravedad, pero esto no siempre es así como atestiguan los casos de envenenamientos como poco sospechosos por parte de especies de culebras cuyo veneno está resultando no ser tan débil como se pensaba, de hecho muchas especies que antiguamente eran mascotas comunes hoy en día están bajo sospecha o se sabe que son potencialmente peligrosas para el hombre e incluso otras muy frecuentemente mantenidas, como es el caso de las serpientes hocico de cerdo Heterodon, producen unos envenenamientos con síntomas locales que resultan a primera vista poco agradables.

Sin embargo algunos aficionados puede muy bien optar por saltarse el paso de las culebras opistoglifas y elegir otro tipo de especies cuyo veneno es, según dicen algunas fuentes, poco potente. Es por ello por lo que muchos aficionados comienzan por este tipo de animales a introducirse en el mundo del mantenimiento de las serpientes venenosas, entre las especies más comúnmente mantenidas figuran las víboras de fosetas arborícolas asiáticas Trimeresurus, etc o las africanas Atheris o el norteamericano mocasín cabeza de cobre Agkistrodon contortrix e incluso nuestras propias víboras de la península ibérica así como otras especies europeas, etc, sin embargo el hecho de que estas especies no sean capaces ( al menos en teoría ) de matarte no significa que no sean peligrosas ya que pueden provocar desde casos mortales aunque raramente a graves trastornos de la coagulación sanguínea, necrosis en los tejidos que puede desembocar en la pérdida de, por ejemplo, dedos, daños en órganos como pueden ser los riñones y hacer que su dueño pase una estancia en el hospital que sin los sueros antiofídicos necesarios puede llegar a ser notable, de hecho, si existen sueros disponibles contra la mordedura de estas especies es por algo y seguro que si uno es accidentalmente mordido por su víbora de selva ( Atheris ), su víbora del bambú o su mocasín cabeza de cobre la “agradable” experiencia hará que se replantee muy seriamente su afición.

El siguiente paso que una persona que ya ha superado todos estos pasos antes mencionados y ya goza de cierta experiencia con el mantenimiento de según que especies puede muy bien llegar a seguir ascendiendo en la escalada dentro de las serpientes venenosas y muy bien puede decidirse por la adquisición de ejemplares ya con venenos ciertamente potentes, aquí ya entran en juego las serpientes de cascabel, las grandes Bitis africanas y algunas especies de cobras, por supuesto estos animales ya no son cosa de broma en cuanto a peligrosidad y dificultad de mantenimiento, no obstante, estos animales mencionados no son “ lo más de lo más “ dentro de las serpientes venenosas ya que algunas personas, es de suponer que solo los más experimentados, siguen ascendiendo en el escalafón y mantienen animales bastante más difíciles y peligrosos que estos, estoy hablando de los grandes elápidos como mambas verdes o negras, taipanes de Papúa o Australia y cobras no tan “ fáciles ” de manejar como la típica cobra de monóculo que puede llegar a conseguir todo el mundo sino cobras de selva Naja melanoleuca o cobras de el Cabo Naja nivea, animales que dentro de un terrario, sobre todo si son nacidos en cautividad o llevan mucho tiempo viviendo en estas condiciones, pueden llegar ser relativamente más tranquilos que sus parientes salvajes pero que no dejan de ser los “ terroristas con colmillos “ que cierto herpetólogo describió, con estos animales las posibilidades de no salir vivo de un error son considerablemente más notables y en un plazo de tiempo más corto que con las víboras, serpientes de cascabel u otras y desde luego implican una seriedad y sentido de la responsabilidad más que notable por no decir extremo.

Indudablemente quizá lo aquí descrito se acerque a la realidad de las personas que estén pensando en conseguir o ya poseen serpientes venenosas viviendo en sus casas o quizá yo no haya acertado en nada ya que cada poseedor de estos animales tiene su propia historia, no obstante la pregunta del millón es: ¿ toda esta compra venta de animales finalmente regalados, revendidos y descartados como si fueran algo ya inservible en el mejor de los casos, los riesgos que se corren como poner en peligro vuestra vida y la de los demás que os rodean incluida familia, vecinos, etc, el miedo a una fuga, la incertidumbre, la intranquilidad, realmente merece la pena ?

Pensadlo bien.

Mordeduras de serpiente. Curanderos



          Los principales enemigos de las personas que sufren una mordedura seria de serpiente en los países más afectados por el ofidismo son: la falta total de sueros antiofídicos adecuados o en cantidades insuficientes, los primeros auxilios inadecuados, la falta de centros de salud donde administrar dichos sueros adecuadamente, la ignorancia y la labor de brujos, curanderos y chamanes.

         La acción de los curanderos frente a un caso de envenenamiento ofídico donde la serpiente ha inoculado una cantidad significativa de veneno resulta tan nefasta como lo son los antiguos primeros auxilios en caso de mordedura ya que no solo no benefician en absoluto al herido, excepto quizá aliviándole psicológicamente haciéndole pensar que se va a salvar, sino que además perjudican su salud al ser imposible que sus tratamientos neutralicen las toxinas que se mueven libremente por su organismo causando cada vez más daños. En el caso de que el herido sobreviva al envenenamiento pero padezca las consecuencias de síntomas locales como pueden ser necrosis en la zona afectada posiblemente la infección resultante o la falta de higiene y antibióticos conseguirán finalmente lo que el veneno no pudo hacer o todo terminará con la persona sufriendo una terrible malformación en la zona o miembro afectado que, posiblemente, la incapacitará durante el resto de su vida, además, y para mas INRI, dichos tratamientos tradicionales retrasan la administración de el único tratamiento efectivo ante un envenenamiento moderado o grave con posibles consecuencias fatales.

         Hasta que los investigadores médicos consigan inventar, patentar y comercializar un medicamento todavía mejor que los sueros antiofídicos producidos hoy en día, la única cura es y será el uso de estas medicinas ante un caso de envenenamiento producido por una serpiente o cualquier animal dotado con un veneno lo suficientemente potente  como para resultar un peligro cierto para la vida.

         No obstante si esto es así, ¿ por que miles de personas en muchos países en vías de desarrollo siguen acudiendo a brujos y curanderos con la esperanza de que ellos les hagan sanar mediante sus prácticas? Existen varias razones que mencionaré aquí.

-         La imposibilidad de acudir a un hospital situado a muchos kilómetros por parte de personas que viven en comunidades aisladas.

-         La escasez de vehículos de transporte y de carreteras adecuadas transitables durante todo el año.

-         La falta de hospitales frente a la presencia más cercana de curanderos los cuales, además, cobran menos que un hospital por sus servicios.

-         La posible falta de sueros antiofídicos en dichos hospitales y de personal médico que sepan tratar un envenenamiento con ellos.

-         El hecho de que todas las mordeduras no son producidas por especies venenosas y ante ello las prácticas de los curanderos aparentemente “salvan” la vida del accidentado.

-         El hecho de que en muchas ocasiones las serpientes venenosas no inoculan veneno con su mordedura dando lugar a envenenamientos nulos o leves siendo, por regla general, mucho menos comunes los casos mortales con lo que una vez más queda demostrado que el trabajo de los curanderos “funciona” salvando la vida del accidentado y si el accidentado salva su vida pero presenta síntomas locales causados por la acción del veneno como una herida necrosada, bueno, las excusas por parte del curandero valiéndose de la ignorancia del accidentado harán el resto.

-         Si el accidentado acude al hospital y no al curandero - el cual es un miembro importante dentro de su comunidad - este muy bien puede tomar futuras represalias en su contra por este desaire.

-         La desconfianza que mucha gente tiene hacia la medicina moderna, los médicos y hospitales cuyo trabajo y métodos resultan tan diferentes a las medicinas tradicionales que practican los curanderos y que conocen desde siempre.

-         El hecho de que hay gente que piensa que en el hospital le van a engañar.

Ante todas estas razones negativas ( y muy posiblemente existan muchas más ) pero para intentar concienciar a la gente de que acuda a hospitales y no a curanderos, brujos, chamanes, etc y, a la vez, que entiendan la importancia de un envenenamiento ofídico y en que radica su cura me remito a la frase escrita por Héctor Charry Restrepo ( de quien merece la pena hablar con mucha más calma en este blog y así se hará ) quien lucha contra el ofidismo y además en “el campo de batalla”, esto es, produciendo sueros antiofídicos que salvan muchas vidas todos los años en su país natal, Colombia. Héctor dio una excelente explicación y “ para todos los públicos “ acerca de la acción del veneno en el cuerpo humano y su tratamiento la cual era más o menos así:

“ Si el veneno es un incendio dentro del cuerpo humano y el suero antiofídico
son los bomberos, si estos últimos actúan rápidamente los daños serán
pocos, pero si llegan tarde no encontrarán más que destrozos “


         Y esto no puede ser más cierto, si se acude a un curandero para recibir un tratamiento ( que además es inadecuado y contraproducente ) ya se está perdiendo un tiempo precioso en acudir a un hospital por lejos que esté y, como hemos visto, en la lucha contra este tipo de “incendio” el tiempo cuenta y mucho, ya que cuanto más tiempo se tarda en recibir “ a los bomberos “ más posibilidades existen de sufrir daños en órganos importantes, mas extensas son las posibles necrosis con lo que resulta más fácil quedar desfigurado o lisiado y más posibilidades hay de morir existen.

         Nunca es demasiado tarde para recibir sueros antiofídicos en caso de mordedura y los curanderos carecen de ellos, solo existen en los hospitales y es ahí donde hay que acudir tan rápidamente como sea posible y con el herido en reposo.